DIARIO DE MI PUTTA MILI – 3ª PARTE

Las vacunas del asco.

Son las 07:00 de la mañana del segundo día en el cuartel. Hoy nos van a poner las vacunas del “ asco “. Ya sabéis pa que no te dé asco las comidas que nos van a poner aquí, y yo me preguntaba, tan mal se come aquí?

Tenemos 20 minutos para levantarnos, vestirnos y formar en la puerta de la batería. Nos pasan revista y nos dicen que hay que estar afeitado todos los días y que cuando vengamos del desayuno, nos harán una revisión del pelo y el que lo tenga más largo de lo establecido, pues billete pa la peluquería, pero primero tenemos que ir a botiquín para que nos pongan las vacunas y una simple revisión médica.

 

Recuerdo que cuando llegamos a la enfermería, nos dijeron que teníamos que formar en fila india y desnudarnos casi por completo, osea todo menos los calzoncillos.

Mientras esperaba en la cola y veía cómo avanzaba, miré hacia adelante y me sorprendí cómo a cada lado del recluta habían dos enfermeros con sendas jeringas que pinchaban sin apuntar, osea a estilo compadre e inmediatamente el recluta caía desmayado.

Yo me decía, Dios eso tiene que doler como pa que un tío se caíga reondo!!

Conforme me iba acercando “ al matadero “, comprobé que no todos los reclutas de desmayaban. Yo creo que la tensión del momento, aquella situación nueva y los nervios acompañaba a la puntillá que algunos no soportaban y caían cómo toro matao en el ruedo.

En fín, que cuando me tocó a mí, pues no fué para tanto. Aquí fué donde comprobé que no todos estamos echos de la misma pasta. Pero sin menospreciar a nadie pues cada uno es como es, con sus virtudes y sus defectos.

Después de las vacunas nos inspeccionaron el resto del cuerpo por si traíamos alguna “ anomalía “, digo yo.

 

Justo a continuación, nos llevaron a un salón dónde cabían unos 100 hombres y nos dieron unas charlas sobre como reconocer los galones de los mandos, cuando se levanta la mano para saludar y ése tipo de cosas.

Ésas charlas de teoría las daríamos durante los dos primeros meses y nos informaron que estaríamos esos 2 meses también haciendo instrucción para entrenarnos para lo que sería nuestro desfile para la jura de bandera.

 

A continuación hicimos un breve recorrido por lo que serían las instalaciones que usaríamos en esos 2 meses y las que NO podíamos usar y estaban reservadas sólo para los soldados. Nosotros éramos reclutas a punto de empezar la UIR. ( Yo en un primer momento entendí que nos enseñarían a salir corriendo, por eso de UIR. Jeje )

Llegó el mediodía, formamos otra vez antes de ir al comedor a almorzar y nos dieron el resto del día libre.

Entonces tal como le prometí a mi novia, me puse a escribirle mi primera carta como recluta.

                                                        !! Qué emoción !!

Estando en mi cama escribiendo, el chico de arriba me saludó e intercambiamos una extensa y curiosa conversación y me llamó la atención que se quejaba por todo ( Maruja ).

Decir que ya en el primer día que llegamos al cuartel nos habíamos juntado los reclutas de procedencia de la misma zona, los sevillanos, los malagueños, los granaínos...etc y nos habíamos repartido la camareta ( habitación ) y camas por comunidades y provincias, fué divertido. En las camas litera de mi derecha estaban otros dos sevillanos ( Petra y Medrana ) con quien con el tiempo hice una verdadera amistad.

Poco a poco nos íbamos yendo hacia la cantina, el único lugar donde podíamos hacer una vida más civil, así digamos.

Ésa tarde fué cuando realmente tuve mi primer contacto ya más directo con el resto de mis compañeros reclutas. Nos fuímos presentando y empezamos a hacer amistad, pues estaríamos 9 meses juntos y lo propio era llevarse lo mejor posible, no?

Entonces acercándose la hora de retreta ( recogerse para dormir ), nos fuímos a formar nuevamente para ir al comedor a cenar.

Decir que la comida era tipo buffet y la bebida toda la que quisiéramos excepto cerveza. No está mal, no?

Entonces nos dieron retreta y cuando subimos para la camareta, todos corríamos a coger toallas y hacer cola para las duchas. 

 

Eran 4 duchas para más de 100 reclutas. No os voy a describir como eran las duchas de la UIR, sólo unos detalles, eran tétricas, petas y sólo de agua fría y allí hacía un frío que pelaba.

                                                   !! Lamarequelosparió !!

Continuará...

A. David Palacios