La sexta extinción
masiva no se producirá por un desastre natural, sino por la acción
del hombre.
A lo largo de la
historia del planeta Tierra, se han producido varias extinciones
masivas, exactamente cinco, según expertos arqueólogos, biólogos y
geólogos, y todas ellas se han producido por decisión de la madre
naturaleza.
Miles de especies
dejaron su impronta registradas en yacimientos arqueológicos, en
textos antiguos y tradiciones orales de multitud de civilizaciones.
Animales, aves y plantas exóticas pasaron por éste mundo y sólo
quedó su recuerdo fosilizado.
Pero hay pruebas más
recientes de animales que si existieran hoy día, serían las
delicias de miles de personas.
Y hasta hace muy
poco respiraban nuestro aire y compartían nuestra compañía, como
por ejemplo el pájaro DODO, un ave no voladora endémica de las
islas Mauricio, situadas en el océano Índico.
El DODO, así como
otras aves del océano Índico, estaba relacionada con las palomas
que habían dejado de volar para volverse terrestres.
La extinción del
DODO a finales del siglo XVII, lo ha convertido en el arquetipo de
especie extinta por causa de seres humanos.
En éstos últimos
años, hemos sido espectadores de grandes catástrofes en muchas
partes del mundo. Grandes terremotos como nunca se habían
registrado, tsunamis jamás imaginados con resultados terribles,
tormentas tropicales capaces de borrar estados y países enteros de
la faz del planeta.
Pero quizás sea la
acción del hombre el que verdaderamente sea el ejecutor de ésa
sexta extinción, de echo ya es evidente que ésto se está
produciendo.
En su afán por
controlar las fuerzas de la naturaleza, el hombre no es consciente de
que sus consecuencias son inpredecibles a muy corto plazo, y
proyectos como el H.A.A.R.P, SURA, Chemtrails...etc, están
ocasionando convulsiones al planeta que si no se los detiene, dentro
de muy poco pasaremos a formar parte de ésa larga lista de especies
extintas.
Podríamos pensar en
un momento dado que el planeta está un poco cabreado o quizás está
pasando por una etapa de transformación cuyo resultado no podemos ni
imaginar y que lo mejor sería hacer un poco de limpieza, y las
fuertes tormentas solares recientes quizás nos están avisando de
que estamos ya en un punto de no retorno hacia ésa SEXTA EXTINCIÓN.
“ Estos ignoran
voluntariamente que en el tiempo antiguo fueron hechos por la palabra
de Dios los cielos y también la tierra, que proviene del agua y por
el agua subsiste, por lo cual el mundo de entonces pereció anegado
en agua.
Pero los cielos y la
tierra que existen AHORA están reservados por la misma palabra,
guardados para el FUEGO en el día del juicio y de la perdición de
los hombres impíos. “ 2 Pedro 3:5-7
A. David Palacios
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