¡Un satélite espía
extraterrestre podría estar orbitando la Tierra y podría tener unos
50.000 años de antigüedad!
Como si de una
película se tratase, el título y subtítulo de éste artículo es
más que sugerente. Pero tiene más viso de realidad que lo que en un
principio pudiera parecer.
Durante el
desarrollo de una conferencia de prensa en Ginebra a principio de los
90, el Dr. Maskud Chernova, científico ruso espacial afirmó que el
satélite fue rastreado por vez primera por las estaciones de radar
moscovitas en Diciembre de 1988.
El satélite, que
tiene forma de diamante, parece estar protegido por un campo de
fuerza muy poderoso, ya que ninguna sonda rastreadora ha conseguido
acercarse hasta él.
Inclusive los
astrónomos soviéticos, en aquel tiempo, creyeron que se hallaban
ante algún satélite provisto de armas y perteneciente al Programa
de Defensa «Star Wars», un sistema creado por los gobiernos ruso y
estadounidense después de las grandes Oleadas OVNI de los años 70 y
80.
Procedencia
Alienígena
De acuerdo con el
Dr. Chernova, solo quedaba una posibilidad: el satélite era de
procedencia alienígena, y tanto los americanos como los rusos,
mantenían el secretismo al máximo nivel, pues es un tema un poco
peliagudo y que quizás lo más conveniente fuese que ésta
información no transcendiera a la población general para evitar
quizás un pánico innecesario.
El Dr. Chernova
afirmó:
«Queremos saber de
qué se trata ese satélite y qué significa su presencia en nuestra
órbita. A través de nuestros satélites en la Tierra, hemos
analizado y estudiado ese aparato, y descubrimos que es muy grande y,
en términos tecnológicos, presenta un sensible avance sobre sus
similares terrestres.
También la
distancia de la órbita es bastante mayor que la de cualquier otro
satélite terrestre, se cree que para mayor dificultad de ser
visualizado, según la poca información que se tiene sobre el
supuesto satélite espía extraterrestre, los científicos creen que
tiene una capacidad de absorber información muy poderosa y un
radiotransmisor para enviar la información a la civilización que lo
creo.
El Dr. George
Milliard, coincidiendo con Chernova, lo consideró probable evidencia
de inteligencia extra planetaria, y afirmó lo siguiente:
«Este misterioso
satélite es algo nunca antes visto por nosotros. Yo creo que puede
ser la prueba de que un mundo extra planetario nos espía. Al carecer
de datos oficiales, se cree que está equipado con un sistema que le
permite analizar cada aspecto y circunstancia de nuestro Planeta,
estudiando formas de vida, al igual que hacemos los humanos al mandar
sondas de investigación a otros planetas de nuestro sistema solar».
El especialista
añadió:
«Obviamente, viaja
a una distancia considerable para no acercarse a la Tierra y mantiene
una altura mayor que la mayoría de los satélites terrestres;
supongo que fue diseñado para estar en el espacio por tiempo
indefinido. La sola conjetura de que puede tener más de 50.000 años
orbitando nuestro Planeta, nos habla de una tecnología muy avanzada
en relación con nuestra ciencia».
Lo sorprendente fue
que cuando los rusos pidieron información acerca del artefacto a los
norteamericanos, la NASA negó ser propietario del satélite, por lo
que dio comienzo una investigación para averiguar a quien podía
pertenecer si no era ni de construcción rusa y tampoco
norteamericana, solo quedaba Japón y Francia que eran los únicos
con capacidad espacial, pero aseguraron que no tenían nada que ver
con el artefacto que estaría orbitando la Tierra a una distancia bastante
alejada.
Después de muchas
investigaciones, sólo quedaba la posibilidad de que la procedencia
del aparato y satélite espía fuesen de origen alienígena y
demostraría que la civilización que lo creo deberían de tener una
tecnología muy avanzada en comparación con la nuestra y que nos
espían desde los principios de la civilización en la Tierra.
Mientras aquí en el
mundo terrenal nos entretenemos con móviles de última generación,
competiciones futbolísticas a nivel mundial y programas
telebasura, quizás ahí fuera nos están monitorizando ésa raza
alienígena como si de un gran hermano se tratase.
Cómo dijese aquella
serie de misterios X Files, "The Truth Is Out There" (“La
verdad está ahí fuera”)
A. David Palacios
nosotros buscando y quizas esten mas cerca..
ResponderEliminarMás cerca de lo que imaginamos Luis.
Eliminar